Los Ángeles, 7 may (EFE News).- El coronavirus golpeó fuertemente la economía de California, que enfrenta un déficit presupuestario de 54.300 millones de dólares, una cifra mayor a la que enfrentó en la Gran Recesión de 2008 aunque ahora el estado está “mejor posicionado para enfrentarlo”, dijo este jueves el gobernador Gavin Newsom.
En su conferencia diaria sobre los progresos para contener el brote de COVID-19, Newsom se mostró optimista y dijo que California está mejor posicionado para enfrentar esta debacle económica que en la recesión de 2008, aunque resaltó que su optimismo está condicionado a un mayor apoyo federal para California.
“Estos déficit de ingresos son mayores (que en 2008); necesitamos que el Gobierno federal lo reconozca”, dijo el gobernador.
“Realmente necesitamos que el Gobierno federal haga más y nos ayude en este momento”, agregó sin dejar de expresar gratitud al presidente Donald Trump y legisladores de ambos partidos por la ayuda que han dado al estado.
El informe revelado este jueves por los consejeros financieros del estado proyecta una tasa de desempleo de 18 % para el año, una caída de 21 % en nuevos permisos de vivienda y casi 9 % de disminución en el ingreso personal de los californianos.
“La pandemia de COVID-19 ha puesto en peligro la salud, ha estresado el sistema de salud y ha causado pérdidas devastadoras en los ingresos familiares y comerciales”, afirma el análisis publicado por el Departamento de Finanzas de California.
El desalentador panorama augura serios recortes en las escuelas, la atención médica y los programas de redes de seguridad.
En un ejemplo, el sistema de escuelas públicas de California, y los colegios comunitarios, perderán 18.000 millones en la garantía de financiación mínima del estado, echando abajo uno de los proyectos de la administración demócrata de expandir la financiación educativa.
Newsom señaló que hace solo 90 días, California proyectaba un superávit de 6.000 millones, junto a un crecimiento constante y un bajo desempleo.
Las cifras se revelaron un día antes que se inicie la relajación del confinamiento, que permitirá abrir algunos negocios no esenciales como librerías, tiendas de ropa, jugueterías y floristerías, entre otros.
Entre las nuevas reglas, el Gobierno estatal pide que los negocios desarrollen procedimientos de pago sin contacto, tengan desinfectante de manos disponible para empleados y clientes, se aseguren de que los trabajadores tengan equipo de protección adecuado y pidan a los empleados que entreguen los productos a los automóviles de los clientes cuando sea posible.
FOTO: California Governor Gavin Newsom (L) speaks with the media. EFE/EPA/John G. Mabanglo/File